Este viernes fui a ver Origen (Inception en inglés), la última película del director Christopher Nolan, artificie de “Memento” y de “El Caballero Oscuro”. Es una película a la que tenía ganas desde que vi el trailer por primera vez, porque ciertamente, tener como referencia una joya como “El Caballero Oscuro” es un punto a favor.
Lo primero que pensé tras terminar la película, fue que habían merecido la pena los 5’70 euros que me había costado la entrada más el correspondiente viaje a Avilés (más o menos unos 60km). Es una buena película, muy entretenida y que no deja un momento de respiro desde que empieza hasta que termina.
El argumento de la película gira en torno a Dom Cobb (Leonardo Di Caprio), un ladrón que utiliza una ténica bastante sofisticada para robar a sus víctimas: entrar en sus sueños. Cobb es contratado por un cliente bastante poderoso para conseguir que la empresa rival se vaya a pique, pero como si el asunto fuera tan sencillo no habría película, lo deben hacer metiendo una idea en la cabeza de la víctima, llamada “Origen”, algo que mucha gente considera imposible puesto que lo normal es robar las ideas, no introducirlas.
Se ha comparado a esta película con Matrix, pero más allá de que los sueños se producen cuando los personajes están dormidos, no le encuentro demasiado parecido. Personalmente le he encontrado más parecidos con “Shutter Island” y “Olvídate de mi”. Con “El Caballero Oscuro” se encuentra la similitud de la música sobre todo, con Hans Zimmer a al batuta, aunque en mi opinión bastante peor lograda porque se me hizo repetitiva.
Del plantel de actores me quedo con las dos actrices principales. Por un lado, con la francesa Marion Cotillard, que ya es guapísima por sí sóla, pero con los vestidos que le ponen está para mojar el pan (más) y Ellen Page, quien protagonizó Juno hace unos años y a pesar de tener 23 sigue pareciendo una adolescente enanica (¡Nació el mismo año que yo! ¡Sniff!). Sin embargo, me ha dado la impresión que cualquiera de los actores principales es prescindible e intercambiable.
Origen es una película original y será recordada por mucho tiempo por eso, por su manera de tratar los sueños y los elementos del subsconsciente. Sin embargo, para mi Nolan llegó a su cumbre con “El Caballero Oscuro” y va a ser prácticamente imposible bajarla de ese puesto (Una película que cada vez que la veo me emociona, es indefinible).
Así que, caballeros y cabelleras, si queréis dejaros algunos euros en el cine, Origen es una excelente opción si os gusta el género de la ciencia-ficción.