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La muerte de Google Wave

Google Wave, casos de uso
Estos días de atrás, Google daba la noticia en su blog oficial de que daba por terminada la breve andadura de Google Wave, ese intento revolucionario de ser el siguiente paso del correo electrónico. Mucho he leído sobre “gurús” que se quedaron en paños menores tras el fracaso de Wave, de gente criticando a Google y de listillos que se creen que son los mejores porque sabían desde un principio que Google Wave se iba a quedar en nada.

Yo hablé en su día de Google Wave y de mis espectativas en esta aplicación, y tras releerlas puedo afirmar que sigo pensando exactamente igual. Google Wave era una herramienta estupenda para los entornos colaborativos que jamás habría sustituído definitivamente al correo electrónico. ¿Por qué? Pues porque la gente tiene unas costumbres y es muy difícil cambiarlas. No digo con esto que el correo electrónico vaya a ser inmortal ni mucho menos, digo que para que la gente que acostumbre a las cosas hay que ir dando pasos pequeños y no pasos de gigante como hicieron con Wave.

Me sigue pareciendo un invento genial y me alegro de que Google vaya a aprovechar su tecnología en nuevas aplicaciones y que hayan liberado el “drag & drop” al navegador como software libre.

Actualmente no creo que exista ninguna aplicación web que ofrezca tantas características por tan poco ( gratis) porque no hay que olvidar que aparte de la inmediatez a la hora de transmitir información a través de él, se podían realizar plugins, hojas de cálculo, poner vídeos, imágenes, etc de una manera realmente sencilla.

Posiblemente uno de los mayores errores que cometió Google con Wave fue lanzarla prematuramente, con un sistema de invitaciones cuando aún no estaba acabado y que por eso las primeras críticas (las más importantes) sobre el producto fueron negativas.

Por mi parte, me parece que Google Wave será una herramienta que se valorará con el tiempo, cuando ya no esté, y que mucha gente la echará de menos al realizar ciertas tareas colaborativas. ¿Habría sido una solución convertirla en una herramienta exclusiva de Google Apps para las empresas?

Soy de los que opina que nuestras vidas serían más difíciles si Google no existiera y hubiera publicado algunas de sus herramientas (Maps, el buscador en todas sus variantes, Gmail, Adsense, etc) de manera gratuíta y abierta a todo el público, así que los que ahora se hartan a criticar a Google quizás deberían ser un poco más comedidos, porque como suele decirse “está todo inventado” y cada vez es más difícil dar con la gallina de los huevos de oro, sobre todo cuando llegamos a un punto de comodidad y perfección informática tan grande como en el que nos encontramos.

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