Como seguramente todos sabréis, el Gobierno tiene planeado subir el IVA en Julio, situando en el 18% el general (elementos que no son de primera necesidad) que antes estaba al 16% y al reducido (impuestos de la hostelería y turismo) en el 8%, aumentándolo un 1%.
No soy economista ni nada por el estilo, pero desde mis limitados conocimientos de lógica, esta medida me parece que choca de bruces con la situación actual de la economía por las consecuencias que va a conllevar. Está claro, que esta medida va a repercutir de una manera u otra en los precios, y solamente se me ocurren dos maneras de actuar de los comerciantes: subir el precio de los productos para que a ellos no les afecte la subida del IVA o bajar el precio de los productos para que con la subida de IVA se queden como antes.
Cada una de las dos medidas será mala para el consumo, la primera porque no se puede pretender fomentar el consumo con una subida de precios y la segunda porque perjudicará directamente a los comerciantes, que verán mermados sus beneficios. Yo voto por la primera opción debidamente redondeada hasta la siguiente unidad ( precios++ ).
Éso sí, los salarios de los trabajadores no suben, y no resulta nada lógico que los precios sean prácticamente iguales (o mayores en algunos casos, como por ejemplo en el sector del entretenimiento) cuando el salario mínimo apenas llega a la mitad del de nuestros vecinos. Evidentemente algo no encaja.
Entiendo que El Estado necesita una financiación, pero esta medida me parece errónea cuando se están concediendo subvenciones a empresas y negocios que no serían rentables sin ellas (a ver cuanto aguantan los concesionarios y la industria del motor en irse a pique).
Esto lo arreglamos entre todos, pagando más para que unos pocos vivan mejor.