Llevaba ya bastante tiempo queriendo comprarme un portátil y, por fin, ayer di el gran paso y comencé con los trámites para hacerme con el pequeño MacBook de Apple – de color blanco, por supuesto- en la AppleStore. Decidí comprarlo en 10 plazos sin intereses, y, como no me convencía demasiado adquirir un portátil con solamente un Giga de RAM, pues le metí dos -no vaya a ser que luego tenga problemas con aplicaciones (léase Parallels ;)).
Ahora sólo me toca esperar – y rezar- para poder disfrutar de él en las vacaciones de Navidad, ya que el lunes tengo que llevar los papeles de financiación a La Caixa, luego esperar que den el visto bueno cuanto antes a Apple y esperar alrededor de una semana a que me lo envíen a casa.
Cruzo los dedos.