Hace unos días, Nintendo reveló n una rueda de prensa el precio y la fecha en la que estará disponible su próxima consola portátil: la Nintendo 3DS, una consola con unos gráficos bastante impresionantes que además permitirá ver los juegos en 3D sin necesiadad de gafas.
La consola estará disponible el 25 de Marzo y su precio rondará los 250 euros, a pesar de que esa cifra no ha sido confirmada del todo. Inicialmente el precio puede parecer caro teniendo en cuenta los precios actuales de las consolas de sobremesa: Xbox 360 cuesta 250 euros en su versión más cara y PS3 270 euros. ¿Merece la pena pagar lo mismo por una consola portátil que por su hermanas mayores? Seguramente habrá gente que opine que sí y otra que no dependiendo de sus gustos y necesidades. Por ejemplo, Kinect vale 150 euros y un iPhone casi el doble: cerca de 500, pero cada uno de estos gadgets está enfocado a un sector diferente.
Desde luego, uno de los factores más importantes (por no decir el que más) a la hora de comprar una consola son sus juegos, y es de reconocer que de salida, la Nintendo 3DS pinta bastante bien, ofreciendo un catálgo bastante completo y variado de juegos, mezclando algunos que parece que van a estar bien otros que tienen pinta de basurilla.
Un punto caliente del catálogo de la consola tiene pinta de ser los ports de Nintendo 64, con Ocarina of Time y Starfox a la cabeza. Sin embargo, no sé hasta qué punto puede ser beneficioso para el lanzamiento de una consola que dos de sus juegos estrella sean ports/remakes, aunque también tenga otros para explotar la potencia gráfica como Metal Gear u prometiendo ofrecer algo nuevo como Kid Icarus. No he nombrado Resident Evil porque vaticino un juego con buena presencia y poco contenido, como en las últimas versiones. Está bien para demostrar una de las características de 3DS como es su tienda de juegos, pero… ¿De verdad no había nada mejor que ofrecer? Seguro que esto contentará a los usuarios que se compran el mismo juego una y otra vez para sus nuevas consolas, pero a la mayoría nos basta con tenerlos una vez para regocijo de nuestras carteras. A donde quiero llegar es a que no se va a poder vivir eternamente de las rentas y de los éxitos del pasado: un Mario Galaxy totalmente nuevo para 3DS habría resultado impresionante, sobre todo si sus efectos tridimensionales merece la pena.
No poder ver los juegos en 3D en las páginas de videojuegos de Internet o en las revistas especializadas puede ser uno de los grandes hadicaps de Nintendo a la hora de vender las virtudes de su consola. Dicho esto, me parece un error mantener el actual diseño de Nintendo DSi incluyéndole un joystick en la posición en la que antes estaba el pad digital, situando este último en una posición de acceso aparentemente incómodo (como el de PSP Go!).
Sea como fuere, cada vez queda menos para que la consola esté a la venta y muchas de estas dudas quedarán subsanadas. En lo personal, tengo ganas de probar la consola para ver si responde a mis espectativas.