No suelo comprar juegos de PC porque tengo la consola bien surtida, razón por la que no estaba al día de las últimas artimañas de las compañías para combatir la piratería, que rozan lo absurdo y que a quien perjudican es claramente al jugador, al usuario, al cliente… llamadlo como queráis.
El asunto es que Diablo III requiere de una conexión permanente a Internet para jugar, y si en un momento determinado no dispones de ella, búscate otro hobby, te quedas sin jugar. Lo curioso es que da igual que tu intención sea jugar online u offline porque no es posible ni lo uno ni lo otro debido a que al entrar en el juego debes introducir tus credenciales de Battle.net (la plataforma online de Blizzard).
Lo curioso, además, es que mientras estás jugando offline no suele ser muy difícil que se den momentos con lag. Sí, jugando offlinehemos pagado por un juego con fecha de caducidad, puesto que aunque el tiempo de vida de los juegos de Blizzard en sus servidores es alto, no será eterno. Por otro lado no vamos a poder jugar en sitios en los que no haya conexión a Internet, o en caso de haberla, dependeremos de nuestra operadora de Internet para jugar (y todos sabemos que el uptime de las líneas y el servicio de las operadoras es del 100%…).
Pero lo mejor de todo es que se puedan dar casos como el de ahora mismo, que un domingo por la tarde estén los servidores en mantenimiento y no podamos jugar offline. Está bien que busquen maneras de combatir la piratería, pero una chapuza es una chapuza, y esto lo es.