Acabo de ver el octavo capítulo de la tercera temporada de Perdidos y acabo de quedar alucinado. Es uno de esos capítulos que crean afición y, a pesar de solventar algunas dudas sobre cosas que pasan en la isla, cuando termina nos deja con incógnitas distintas a las que teníamos en un principio (Con estupendo final he de decir).
Mi pregunta es clara ¿Cuánto conseguirán estar así? Cada vez hay más sucesos sin respuesta y empieza ser un poco frustrante para el espectador que no se vayan subsanando poco a poco. Que jueguen a hacer la serie interesante está bien, pero al menos deberían resolver algunas de las dudas de la primera temporada, antes de que (esperemos que no) cancelen la serie porque la gente deje de verla debido a estar hartos de hacerse preguntas y no obtener respuesta. Creo que la serie está empezando a ir demasiado lenta…
¿Quien se supone que es la vieja del anillo? Hagan sus apuestas