El Sello de Calidad de Nintendo era una marca que en tiempos de NES certificaba que un juego tenía la suficiente calidad como para aparecen en las consolas de Nintendo, una muestra de calidad. Sin embargo, con el paso de los años y el encarecimiento de los desarrollos, el sello ha perdido gran parte de todo su valor, convirtiéndose en una mera “señal de marca”. Ésta ha sido su evolución:
En tiempos de NES
- El juego debe tener una gran calidad. No pueden tener bugs que lo cuelguen.
- Los jugadores deben morir lo suficiente como para equiparar el precio del juego al dinero gastado en su versión arcade.
- Debe funcionar mejor si se sopla el cartucho.
En tiempos de Game Boy
Los gráficos deben ser negro y gris, pero no por limitaciones del sistema, ya que en realidad éste dispone de una paleta de 16 colores perceptibles por el ojo humano. Simplemente porque sólo nos gusta el negro y el gris.
Tiempos de SNES
Debe utilizar alguna de las siguientes características: El chip Super FX, Modo 7 o el espacio libre después de la palabra “Super” para poner el nombre de tu juego.
Tiempos de Virtual Boy
Lo mismo que para Game Boy, pero sustituyendo “Negro y Gris” por “Negro y Rojo”.
Tiempos de Nintendo 64
Debe aprovechar el genuino controlador, haciendo que los jugadores giren el stick analógico hasta que se rompa (debería durar dos rotaciones enteras).
Tiempos de GameCube
El juego no puede salir en el mismo mes que otro juego de GameCube.
Tiempos de Nintendo DS
Debe usar la pantalla táctil de una forma arbitraria y poco creativa para realizar acciones que podrían ser realizadas perfectamente con el pad y los botones.
Tiempos de Wii
El disco del juego debe tener el mismo tamaño que la ranura del frontal de la consola.
Podréis estar más o menos de acuerdo con ello, pero no me negaréis que con el tiempo, este sello ha perdido todo su valor, y el significado del mismo ya se ha perdido entre capas de polvo generación tras generación.
Traducido de Something Awful.
PDTA: Sí, en este post puse la vaca y en el anterior la caca 🙂