¡Y vuelta a las andadas!
Por fin tengo la cabeza suficientemente bien después de la operación como para escribir algo aquí. Y es que estos días de atrás fueron bastante duros, sobretodo el día mismo de la operación. Sin embargo, el peor recuerdo que guardo de esta experiencia no tiene que ver con la nariz, sino con la espalda; es desesperante estar casi un día entero boca arriba, tumbado en la cama y sin poder moverte practicamente te deja la espalda destrozada. La experiencia de ser anestesiado me pareció muy curiosa; te acuestas, te inyectan la anestesia, cierras los ojos e inmediatamente despues los abres… Leer más »¡Y vuelta a las andadas!